Llega el final del año y con él, los trámites fiscales. Durante estas semanas hasta fin de año, es recomendable revisar nuestra situación fiscal con el objetivo de evitar sorpresas y pagar menos impuestos. Su desorganización puede desembocar en pérdidas de deducciones, problemas en el pago de declaraciones, pagos grandes por haber establecido mal las retenciones…Gran parte de estos problemas se pueden solucionar antes de que acabe el año y nosotros, traemos las claves para ajustar y mejorar tu situación fiscal.
Hay que comenzar por lo que estamos pagando o hayamos pagado. Por ejemplo, los pagos anticipados de los impuestos por la mayoría de nuestros ingresos se realizan cuando se producen los mismos. Son anticipos de lo que vamos a pagar y puede suceder que sean insuficientes (y que tengamos que abonar una cantidad extra cuando realicemos la declaración) o que paguemos más de lo que nos corresponde y tengamos el derecho a devolución de parte de esas cantidades adelantadas.
También tenemos que tener en cuenta la naturaleza de nuestros ingresos, pues dependiendo de ellos la declaración y su resultado será más o menos fácil de determinar.
Deducciones por aportaciones a los planes de pensiones
Los planes de pensiones permiten una reducción imponible del impuesto, aunque con límites que oscilan entre 8000€ y el 30% de nuestros ingresos por trabajo o actividades profesionales (el menor de ellos). De modo que debemos ver si hemos sobrepasado o no estos límites, así como la posibilidad de hacer una aportación adicional.
Lo que hayamos aportado siempre disminuirá lo que debamos pagar por nuestros impuestos e incluso tornar negativa nuestra declaración, al mismo tiempo que aumentar nuestros ahorros de cara a una futura jubilación.
Analizar todas las deducciones y justificar las mismas
La declaración que realizamos actualmente, se divide en una cantidad a pagar para el Estado y otra para la Comunidad Autónoma, con deducciones propias para cada comunidad. Existen muchas opciones que en la mayoría de los casos el contribuyente ignora.
Modificar la retención
Durante los últimos meses del año, es frecuente realizar el ajuste de las retenciones de las empresas, para tratar de conseguir que el resultado final de los ingresos se corresponda a lo que tenga que pagar.
De modo que, deberá revisar si se le han planteado circunstancias que hayan podido modificar el ajuste en estos meses, subiendo o bajando la retención.
Existen casos en los que la empresa no está obligada a hacer una retención mayor, como por ejemplo en los contratos inferiores a un año (la retención mínima obligatoria es un 2%).
Pero, lo mejor, es preguntar a un especialista en la materia, que aconseje y gestione toda esta información. En Maestranza Consultores estamos abiertos a responder cualquier duda y resolver cualquier problema que se plantee. No dudes en consultarnos, te atenderemos sin compromiso.
Fuente: Cinco Días